sábado, 26 de noviembre de 2011

Un director muy complejo



“Quién no ha tenido nunca el sentimiento de que algo importante una especie de revelación nos está invadiendo el alma sin saber por qué.  Karl Friston está descubriendo ahora es que el cerebro equivale a un centro de cálculo de probabilidades que elabora predicciones inverosímiles a las que combina con los datos que recibe de fuera. Luego se hace una composición de lugar y toma la decisión que más le conviene. Durante este proceso el cerebro recurre al sentimiento del caos, al estremecimiento de lo que aparenta ser casi imposible, para quedarse luego con una realidad transformada. No es algo distinto de lo que hacen los niños en la playa cuando acumulan granos de arena para formar castillos que tarde o temprano se derrumban”.

Fuente video: youtube
De comprobarse su teoría, contaríamos con una herramienta que podría ayudarnos a descubrir los misterios que se esconden detrás de enfermedades mentales como el alzhéimer o la esquizofrenia. Siendo un hecho relevante y que puede contribuir mucho a la mejora de los tratamientos de enfermedades neurológicas. Y por último un paso más cerca de descubrirnos a nosotros mismos.

En cierto modo, cuanto más nos acercamos a la genialidad
más nos acercamos a la locura.

Karl Friston



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